Encontrar el mejor momento para ti, el tipo de meditación y postura son la clave para desarrollar el hábito de meditar. Ahora bien, al ser el principio, prueba con diferentes meditaciones y posturas y escoge la que más comodidad te ofrece y aporta el estado mental ideal para hacerlo.
Una vez tengas claro todo esto, sigue los consejos que te damos a continuación.
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La meditación como forma eficaz de “sanear” en definitiva
La meditación nos facilita la tarea de explorar los rincones de nuestro subconsciente con la libertad de un observador. Técnicas como el mindfulness, la respiración diafragmática (o respiración abdominal) y la meditación guiada pueden ayudarnos a:
- Identificar los pensamientos obsesivos como “intrusivo” y no como parte de nuestra personalidad.
- Darnos cuenta de que estos pensamientos surgen de forma involuntaria y automática, por lo que no representan nuestro auténtico sentido o nuestros valores como individuo.
- Aceptar los obsesivos y soltar los pensamientos, anulando o reduciendo nuestra carga emocional.
- Reducir la ansiedad, con lo cual también puede disminuir la tasa de pensamientos intrusivos que experimentamos a lo largo del día.
El camino de vuelta
Hace cuatro años, Veronica Blume creó el podcast, El camino de vuelta y, desde entonces se ha dedicado a compartir con sus seguidores un espacio en donde habla de sus enseñanzas y el compromiso que tiene con la práctica de la meditación. También te enseña a conectar contigo mismo y con tu alma.
Para lograr ser la versión plus de ti mismo, este podcast tiene la finalidad de transformar tu mente, cuerpo y alma. Asimismo, los temas que se han abordado están vinculados a la psicología, la espiritualidad, la física cuántica, entre otras disciplinas. Cada una de ellas te ayudará a encontrar tu agente de cambio dentro de ti.
Atención plena o atención plena
Atención plena o atención plena es la capacidad de ser consciente y estar atento a las sensaciones del propio cuerpo y de donde nos envuelve.
Para mantener la calma y concentrarse en el momento presente hay que llevar el sistema nervioso de nuevo a estado de equilibrio. La conciencia plena puede ser aplicada a actividades tales como caminar, hacer ejercicio o comer, aunque lo más habitual es aplicarlo a la meditación.
Tranquilidad espiritual
Dicen que no hay almohada más cómoda que una conciencia tranquila. La paz interior tiene mucho que ver con la rectitud del ser. Tener la conciencia limpia es sinónimo de andar por el sendero de lo correcto.
Quejarnos de todo lo que atenta contra nuestra paz mental y luego perturbar la paz del otro es hipocresía.